Entrevistas

Se cura por la manera en que uno se agencia con los otros, el inconciente se produce, y entonces son máquinas de conexiones, son territorializaciones, son nuevas maneras de formar subjetividades, de buscar sentido, que me parece que están más ligadas a la filosofía de Deleuze.
Pienso que hay un momento de ambigüedad, de confusión y de caos que hay que incorporar al entrenamiento, igual que en la creación... Ese primer estado tiene que ver con lo que decía Winnicott, que si uno deja hablar mucho, mucho a un paciente, de repente puede pasar que él solo se dé cuenta de algo. No interferir. Ya esto forma parte de la estética de un modo de psicoterapia

Freud y Nietzche toman los mismos temas, tienen las mismas preocupaciones, a veces no se sabe si se está leyendo a uno o a otro. Conceptualmente, pienso que la teoría psicoanalítica toca ciertas cuestiones que son de enorme interés filosófico, sobre todo después de la declinación de la filosofía de la conciencia o de la filosofía cartesiana... ..creo que padecemos una gran crisis cultural que está vinculada con la caída del último ideal que tuvo vigencia entre nosotros, pero que remite a una identidad, sobre todo colectiva, mal constituida.

...la introducción del complejo de Edipo en el psicoanálisis por parte del mismo Freud habría que revisarla muy seriamente porque es una introducción que uno diría muy desfigurada, distorsionada por elementos subjetivos, lo mismo que las concepciones de Freud sobre la mujer, que derivan del falocentrismo.
La teoría psicoanalítica sigue girando entorno a un centro, el padre, la castración, el Edipo, eso es epistemológicamente muy envejecido...

...mi pregunta era ¿por qué mujeres que son neuróticas van a ser incapaces de trasmitir el Nombre del Padre? ...la madre del chico autista ha pasado por una depresión puerperal o por un delirio subclínico, que no es estructural necesariamente...pude darme cuenta que la función de la madre, como pasadora del Nombre del Padre, puede fallar en la medida en que ha habido fallas en la constitución de su Edipo, es decir, de su metáfora. Tal vez hubo metáfora, padre simbólico, pero las falencias del padre real, las contingencias, escriben la historia. ...El analista es partenaire real de toda la historia del sujeto, desde antes de su nacimiento, porque ocupa, en la estructura, el lugar de objeto. La estructura inconsciente está dividida en una parte significante y una parte objeto, por lo tanto, el paciente habla, pero lo que no dice es el lugar donde lo pone al analista.

La idea del inconsciente escindido es que es universal, no está planteado en términos de psicopatología, sino como estructuración del psiquismo. Cuando hablamos de modos que coexisten estamos hablando de un funcionamiento psíquico de cierta fluidez. Hablar de tercera tópica es simplemente incorporar al esquema propuesto por Freud de la segunda tópica la barra de la escisión, junto a la de la represión primaria.

El psicoanalista Jose Milmaniene, didacta de A.P.A. desarrolla pensamiento en relacion a contenidos que son de suma importancia para quienes intentas hacer del psicoanalisis una practica. Asi aporta su perspectiva sobre la inclusion del pensamiento lacaniano en A.P.A., el concepto de sublimacion en su vinculacion con la cura analitica, el lugar de la escritura en el analisis y su relacion con el duelo por el padre simbolico, al tiempo que nos ofrece una lectura psicoanalitica sobre el holocausto y la posicion de los analistas frente a tales acontencimientos de la historia.

Cuando egresé de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires ya tenía inclinación por la Psiquiatría y el Psicoanálisis, pero después de una breve práctica en clínica médica, mi interés se incrementó y me volqué al estudio del psicoanálisis, en un comienzo como autodidacta. Eso duró poco tiempo, porque enseguida entré en la residencia de Psicopatología del Hospital Ramos Mejía. Luego, a comienzos del año 75, ingresé como profesor en la Universidad de La Plata.

(...) en los Estados Unidos no hay una política de masas, por así decirlo, con respecto al psicoanálisis.
Nosotros estamos acostumbrados aquí a determinado tipo de eventos, a que haya reuniones que son multitudinarias, nos involucramos como psicoanalistas o como ciudadanos, pero en relación con el psicoanálisis, esto allá no sucede.

El psicoanálisis no ocupa un lugar de validación social como el que se plantea en nuestro país, y esto creo que además de interesante es bueno como para repensar las cosas.
Creo que son otros los actores en todo caso que por su posición pueden validar alguna proposición.

Alguna vez escribí que reconocía como maestro a Eliseo Verón, en el sentido de alguien con quien aprender a leer, pero no en relación con el psicoanálisis.
Me formé con pares, con textos y en mi análisis.
No reconozco, dentro del psicoanálisis, haberme formado con alguien en especial.
Pertenezco a una generación que se inició leyendo a Lacan.

Yo empecé haciendo psicoanálisis de niños en el hospital infanto-juvenil Tobar García.
Durante muchos años trabajé incluso con niños psicóticos, y uno de los síntomas principales de la infancia es la fobia, la zoofobia.
Todo ese trabajo con chicos me fue llevando a reflexionar sobre las condiciones del psicoanálisis en ese momento.