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Presentaciones psicóticas y fenómenos de franja en adolescentes durante el aislamiento

22/04/2021- Por Lucas Sztejfman - Realizar Consulta

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El autor hace foco en la llamativa multiplicidad de consultas recibidas por adolescentes que han presentado algún fenómeno alucinatorio o de índole similar durante el periodo de aislamiento. ¿Qué respuestas adolescentes podemos anticipar o ubicar ante la actual posibilidad de nuevos e intermitentes periodos de aislamiento?

 

                      

 

                             Ilustración de Kitsune Bara*

 

 

 

“Me imagino una tormenta como ésa. Un blanco remolino que apunta al cielo, irguiéndose vertical como una gruesa maroma. Mantengo los ojos y las orejas fuertemente tapados con ambas manos. Para que la fina arena no se me meta en el cuerpo. La tormenta se acerca deprisa. Desde lejos puedo sentir la fuerza del viento en la piel. Va a engullirme de un momento a otro.”

 

                                                          Haruki Murakami (Kafka en la orilla)

 

  

  El fragmento citado responde a un recorte del libro Kafka en la Orilla del escritor japones Haruki Murakami. En el mismo, se relatan las peripecias de un adolescente de 15 años, Kafka Tamura, quien decide escapar de su hogar atormentado por el maltrato de su padre y la ausencia de su madre y hermana. Este fragmento, es uno de los diálogos que tiene el joven con su alter ego a quien el autor nombra como “el joven cuervo”, una especie de voz interior que funciona como interlocutora frente a los sucesivos momentos de soledad que transcurre el protagonista a lo largo de la historia.

 

 

I  Ha sido llamativa la multiplicidad de consultas recibidas por adolescentes que han presentado algún fenómeno alucinatorio o de índole similar durante el periodo de aislamiento. Episodios extraños tales como: voces, ruidos, visiones, destellos o imágenes entre el dormir y despertar. He podido constatar con otros colegas lo frecuente de dichas presentaciones en este periodo tan peculiar.

 

  En general, jóvenes que previamente nunca habían presentado manifestaciones de tipo alucinatorias y mucho menos delirantes.

En su mayoría, episodios que no llegaban a conformar una alucinación en sí, sino más bien fenómenos que se podrían ubicar como extraños o indefinidos. Algo similar a aquello que Lacan denominó como fenómenos de franja.

 

  Estos últimos, son nombrados por Lacan en el seminario 3 cómo fenómenos de discurso situados en el borde del campo de la experiencia, dice: “en la espuma que provoca ese significante que no se percibe como tal”. El significante se situaría en un orden distinto respecto a las perturbaciones de la realidad que comprenden la alucinación y el delirio.

 

  Son llamados también fenómenos de borde, por situarse en los bordes de la estructura del lenguaje. Aquello que prima aquí es la vivencia de extrañeza. Como ejemplo de fenómenos auditivos Lacan ubica los pájaros cantores o los ruidos escuchados por Schreber. En el campo  visual, señala como ejemplo la estela que dejan los rayos divinos al retirarse. (Lacan, 1955).

 

 

II  La finalización del aislamiento obligatorio ha dejado algunos puntos para reflexionar sobre las respuestas adolescentes frente al mismo.

 

  En primer lugar, se ha observado en este periodo, una necesidad imperiosa de hiper-ocuparse como solución frente al vacío. Adolescentes que frenéticamente se aturdían con ruidos y voces de juegos de PC o youtubers; saturación/suturación del agujero a través de la voz y la mirada.

 

  Para otros, la invención fue por la vía de la hiper-movilidad y en cuanto se habilitaron algunas salidas, comenzaron a deambular incansablemente en grupo por las calles.

Por último, algunos otros optaron en una última etapa de la cuarentena por realizar actividad deportiva de modo desmesurado, quizás cuatro o cinco veces a la semana.

Todas las situaciones anteriormente mencionadas, aparecen como soluciones que permiten aturdir de algún modo un silencio “enloquecedor”.

 

  Este silencio se ubica al nivel de un agujero real provocado por el estatuto de mutismo e inmovilidad propio de la cuarentena, detenimiento que se confronta con el empuje pulsional propio de la pubertad.

 

  Se desprende el siguiente interrogante a partir de la clínica con adolescentes en aislamiento: ¿Presupone quizás la tarea analítica un trabajo restitutivo del lenguaje en contraposición al clásico trabajo de vaciamiento de sentido?

El restablecimiento de las condiciones dialógicas resultó más imprescindible que nunca en las sesiones virtuales, nada tan perturbador como permanecer en silencio frente a una pantalla y la mirada del otro.

 

 

III  La reiteración de términos como “aburrimiento” y “distracción” que comandaron el discurso entre sesiones a lo largo de esos días, deja en relieve una sociedad escasamente preparada para soportar el detenimiento de las distracciones. Netflix, amazon, youtube, tiktok y otros resultaron insuficientes luego de un lapso temporal.

 

  Elijo utilizar la denominación de presentaciones psicóticas por el margen de flexibilidad que supone conceptualmente. Pensar en presentaciones implicaría no quedar fijado en la noción de “estructura clínica”, sino más bien pensar en manifestaciones reversibles que se presentan como respuestas a un contexto determinado e inédito.

 

  Del mismo modo, pensar en fenómenos de franja es evitar caer en el diagnóstico express, ubicando algo que aún está en una frontera, en un borde y que todavía no se precipitó hacia un lado.

 

  Partiendo desde la lógica de una clínica discontinuista, fundada en los últimos seminarios de Lacan, resultaría indispensable situar los desenganches al Otro y los sucesivos enganches. La elucidación de dichos momentos en un tratamiento, permitiría posicionarse mejor frente a la dirección de la cura y evitar el sobrediagnóstico.

 

  Pienso el periodo de aislamiento como un momento de desenganche parcial del Otro para muchos adolescentes. En este sentido, estas presentaciones psicóticas y fenómenos de franja parecerían insertarse en esas breves rupturas. El paso del tiempo estaría mostrando la reversibilidad de dichas presentaciones. Quizás son aún un tanto apresuradas las conclusiones respecto a este punto, el aislamiento finalizó pero la pandemia continúa.

 

 

Arte*: para “Kafka on the shore”

https://www.deviantart.com/kitsunebara/gallery/all

 

 

Bibliografía de referencia:

 

Belluci, G. “Psicosis. Estado de situación”, en elSigma hospitales, 2014. https://www.elsigma.com/hospitales/psicosis-estado-de-situacion/13548

Dessal, G. “Continuidad y discontinuidad en las psicosis ordinarias. Tres preguntas a Gustavo Dessal”, en Nodus. L’Aperiòdic Virtual de la Sección Clínica de Barcelona, accesible en http://www.scb-cf.net/nodus/contingut/article.php?art=274&rev=37&pub=1

Freud, S., “La pérdida de realidad en la neurosis y la psicosis”. En: Obras Completas, Amorrortu, Buenos Aires, 1996, vol. XIX.

Lacan, J.: Seminario 3 Las Psicosis. Ed. Paidós, Bs. As., 1984

Lacan, J., “De una cuestión preliminar a todo tratamiento posible de la psicosis”. En: Escritos 2, Siglo XXI, Buenos Aires, 1995.

Lacan, J.: El seminario. Libro 23: “El Sinthoma”, Paidós, Buenos Aires, 2006.

 

 

 

 

 


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