» Psicoanálisis<>Filosofía

Formas actuales de la segregación: migrantes

25/10/2016- Por Cristina Suárez y Marita Salgado - Realizar Consulta

Imprimir Imprimir    Tamaño texto:

No es raro experimentar consternación por acontecimientos globales, uno de los cuales, “las migraciones”, nos muestran algo inédito y a su vez similitudes con otros sucesos. El acontecimiento de los migrantes que llegan a Europa, data de varios años y se visibiliza en 2015, la diáspora que no proviene de un solo origen, sino de África, Siria, y Turquía. Intentan trasladarse con el objetivo de sobrevivir. No son inmigrantes con destino fijo, buscan un lugar donde vivir… Se encuentran ahora confrontados con la presencia de democracias tecnocráticas. Los migrantes se desplazan desde lugares donde el fundamentalismo y la guerra civil tomó el lugar del Uno absoluto para el cual ya no tienen existencia, atraídos hacia la civilización europea. Agamben sostiene que la tesis foucaultiana de la inclusión de la vida en los cálculos del poder, esto es, la biopolítica, debe ser complementada por otra tesis con lo que caracteriza a la política moderna, “en la inclusión de la zôe (nuda vida)…

 

 

  

“El racismo cambia sus objetos a medida que las formas sociales se modifican, pero según la perspectiva de Lacan, siempre yace en una comunidad humana el rechazo de un goce inasimilable, resorte de una barbarie posible”.

                                                              J. Lacan,  “Televisión”

 

 

Abordamos en el presente trabajo el  acontecimiento global de los migrantes, este texto fue escrito  en 2015, los trágicos acontecimientos ocurridos  han aumentado en este tiempo, aunque las ideas y articulaciones presentes en el texto continúan vigentes.

 

No es raro experimentar consternación por acontecimientos globales, uno de los cuales, “las migraciones”, nos muestran algo inédito y a su vez similitudes con otros sucesos.

El  acontecimiento de los migrantes que llegan a Europa, data de varios años y se visibiliza en 2015, la diáspora no proviene de un solo origen, sino de África, Siria, y Turquía.

Se trata de menos del 0,2% de la población que se traslada a Europa. En Líbano, los refugiados son el 25%. Intentan trasladarse con el objetivo de sobrevivir, exilio que se produce por  la guerrilla, la guerra civil o la hambruna.

Sin embargo los actuales migrantes de Medio Oriente y África, no son inmigrantes con destino fijo, buscan un lugar donde vivir, ya ha  quedado atrás la revolución industrial, los  ideales del estado de bienestar se desintegraron. Se  encuentran  ahora confrontados con la presencia de democracias tecnocráticas.

Definamos migrantes en el contexto de Europa en agosto 2015: personas que llegan a territorio europeo  intentando  dirigirse a Alemania, ya que Merkel ha ofrecido un lugar (incierto) para ellos.

 

El derrotero que llevan es de este a oeste, encontrando que,  en el mes de agosto de 2015, se produce una promesa de Merkel de alojar a los migrantes, respondiendo emocionada por las reacciones de algunos de sus aliados como Viktor Orban, quien deja en claro que Hungría no quiere migrantes. “Que se queden en Turquía que es un país seguro” “Merkel practica imperialismo moral”[1]

Entre los meses de  agosto y octubre se produjeron hechos que hacen notar el estado de excepción que ya estaba instalado.

El estado de excepción es definido como “la suspensión del derecho para garantizar su continuidad” o “la forma legal de lo que no puede tener forma legal, porque es incluido en la legalidad a través de su exclusión[2]”. El estado de emergencia, similar al de excepción en Alemania, fue declarado formalmente en Francia por el Ejecutivo francés a partir del 13 de noviembre de 2015 luego de los atentados producidos en Paris  y se extendió a 3 meses, pero pensamos que el estado de excepción se ha convertido en permanente.

Los migrantes son tratados como objetos cambiando los estados soberanos frecuentemente las normativas de  ingresos de los mismos: “Alemania aplica desde el pasado 21 de octubre de nuevo el sistema de Dublín para los sirios,[3] salvo en el caso que hayan ingresado en la zona Schengen[4] a través de Grecia y hayan sido registrados allí”[5]

El Gobierno alemán logró el 11/11/15 acordar sobre un tema oscuro en el espacio Schengen. Los líderes de la gran coalición U. E., “anunciaron la creación de centros de internamiento para los recién llegados con escasa probabilidad de obtener el estatus de refugiado. Se trata de instalaciones pensadas para acelerar el proceso y, sobre todo, para expulsar rápidamente a los que lleguen de países considerados seguros. Alemania endurece así sus normas de acogida, pese a haber rebajado las exigencias de los halcones de la coalición, la CSU bávara”.[6]

El acontecimiento migratorio, se ha convertido además. en un marco de catástrofes,  como el de los cadáveres de migrantes afganos encontrados en un camión frigorífico, o el del niño Aylan, cuya foto viralizó las redes ambos en 2015, además de los barcos naufragados. La modalidad que se instaló en los últimos años en Europa, se verifica con migrantes en zonas que van cerrando las fronteras, y que obligan a los sujetos a escurrirse por recovecos. Ese movimiento, homólogo al libidinal, que no se detiene, ha sido contrarrestado por acciones diversas en la Unión Europea. Un incipiente desplazamiento a América (familias sirias residentes en Uruguay, ofertas concretas de Argentina para familiares de sirios efectuados en el 2014) es el comienzo de ese desplazamiento.

 

 

Zoe, Bios y lo real

 

Para Aristóteles la vida se divide zoe, la vida natural y bios la vida del pensamiento filosófico y la política.

La vida como zoe estaba para el pensamiento griego al margen de la vida política, no era del interés del filósofo. En la modernidad comienza a tomarse en cuenta zoe, la nuda vida, como “la vida a la que cualquiera puede dar muerte, pero es a la vez insacrificable del homosacer”[7] .

El homo sacer es un deshecho.

Es a la vida como zoe que apunta el poder político, lo cual da lugar a la biopolítica.

 

Agreguemos que “al incluir al viviente en tanto nuda vita dentro del derecho mediante su exclusión, pero que en tanto ciudadano ya no es más mero viviente, pone su nuda vita a disposición del poder político”[8] “El homo sacer es una figura del derecho romano antiguo, que al igual que el musulmán en Auschwitz y el estado de excepción  son la cifra para comprender la biopolítica contemporánea”[9]. Nos explicamos: El sujeto nace y está hablado, no es nuda vida. Podría pensarse que esas tres formas el estado de excepción, la nuda vida y el musulmán se acercan a lo real de la vida y a la fuga del semblante.

Agamben sostiene que la tesis foucaultiana de la inclusión de la vida en los cálculos del poder, esto es, la biopolítica, debe ser complementada por otra tesis con lo que caracteriza a la política moderna, “en la inclusión de la zôe (nuda vida)  lo decisivo es el hecho de que, en paralelo al proceso del cual la excepción se convierte en regla, el espacio de la nuda vida que estaba situada originalmente al margen del orden jurídico, va coincidiendo de manera progresiva con el espacio político, de forma que exclusión e inclusión, externo e interno, bíos y zôe, derecho y hecho, entran en una zona de irreductible indiferenciación.”[10]

 

En cuanto al cuerpo: el primer registro de la nuda vida como sujeto político es en el siglo XIII en la base de la democracia moderna con el Habeas Corpus, “el nuevo sujeto de la política no es ya el hombre libre sino… el cuerpo[11] Esto es: el habeas corpus como la protección democrática del cuerpo forma parte de la Biopolítica.

De ahí que en la fundación de la política se presente, como vimos en Agamben, una línea que divide la mera vida guiada por la fuerza que le otorga la naturaleza (zoe) y la vida propiamente política, que tiene como soporte la ley (bios)

En términos de Agamben el estado de excepción deviene la regla, es el paradigma.

El movimiento de los migrantes, en los intersticios,  permite hacer una resistencia al poder inmovilizante de la biopolítica.

En otros términos, es al cuerpo al que se dirige la biopolítica, a lo real de la vida. ¿Es la indefensión del migrante un trazo de lo real?

La vida, como lo que excede a lo que se puede decir, es  tomada por el psicoanálisis como fenómeno en el campo del lenguaje, es decir como ese real específico que es el goce, el cuerpo “vivo”. “La vida es lo que hace signo de un placer más allá de la homeostasis de energía en el universo. Donde hay vida hay "jouissance", hay una pérdida de la homeostasis y un desequilibrio de energía que introduce a su opuesto en el campo del lenguaje, es decir la muerte.[12]

 

 

La comunidad. Lo común. El don

 

Para  Roberto Esposito la comunidad no es es un bien o un valor como en lo es en filosofías como el neocomunitarismo y éticas de la comunicación, sino que se trata de “Lo común que se opone a lo propio o privado, y es también el munus, el don, es lo que se da no lo que se recibe”[13]. La comunidad está unida no por una propiedad sino por una falta.

Escribe Espósito: “El hombre moderno por el contrario no puede ser sino se libera de la deuda, del contacto que le produce la vecindad”[14]. Esto es: el moderno, no tolera la deuda, la falta, y no reconoce dar el don.

De acuerdo a la conformación de los Estados Modernos, no hay lugar vacío para el don, una de las partes de la topología que sustenta Esposito.

Los migrantes, entonces no encuentran de acuerdo a esta topología el lugar vacío, el munus, donde se pondría en acción el don.

Los migrantes  no encuentran un lugar en el Otro para alojar bios y zoe, en términos de Lacan un topos donde alojar goce y cuerpo vivo que son condiciones de la vida.

 

 

Kant y el estado de excepción

 

Respecto al estado de excepción, estamos en presencia de una ley que está vigente pero no significa nada. Es en Kant donde se da esa ley sin significado, una ley que lleva al punto cero de la ley.[15] Queda solo su forma.  

La ley está encarnada en aquel que detenta la soberanía, quien la detenta, el soberano, es el que puede declarar el estado de excepción, esto presenta una paradoja, puede declararlo estando fuera de la ley. La excepción suspende la norma, no la impone.

La excepción es la estructura de la soberanía[16], es la vida que queda incluida en el derecho por medio de la suspensión. La vida queda “en bando”, abandonada de la ley.[17]

El Imperativo de la ley, como imperativo categórico kantiano, que es universalizante rechaza el goce singular.

Agamben subraya la sutil anticipación de Kant, … una de las paradojas del estado de excepción es que sea imposible distinguir en él, la transgresión de la ley y su ejecución, lo que es conforme a la norma y lo que en la vida coincide sin fisuras”[18]

Es decir, la ley vacía de contenido, como imperativo sostiene el estado de excepción rechazando lo vivo del goce singular.

Este goce singular rechazado por el imperativo categórico Kantiano, es el que se transforma en odio al goce del Otro que es en verdad odio al goce propio, es decir rechazo de lo real[19].

El rechazo del goce conduce al racismo tal como Lacan lo demuestra en Televisión, anticipándolocomo creciente.

Es posible pensar que los migrantes son una expresión de un modo de segregación que comenzó en el siglo XV con el colonialismo, y luego en el XIX con el imperialismo.

Hay por lo menos dos segregaciones que se producen actualmente con los migrantes,  la del lugar del que parten, y las del lugar que llegan, una marcada por el fundamentalismo del Uno de la religión, y la otra por el fundamentalismo del mercado. Y en el errar: la posibilidad de la vida como de la muerte.

 

 

Guerra permanente

 

El estado de excepción es subsidiario de la guerra permanente, que es la guerra actual.

Kant sitúa en La Paz perpetua que La Paz entre los hombres que viven juntos no es un estado de la naturaleza[20]”, aunque haya paz está latente la guerra. La Paz debe ser instaurada. Si las inclinaciones humanas hostiles trabajan para La Paz perpetua entonces esta “no es una mera ilusión”[21]. Sitúa que la guerra lleva al acuerdo de los pueblos, en razón del beneficio que trae la Paz. Esta referencia Kantiana de los artículos preliminares de una paz perpétua, están definidos para la guerra tradicional.

Civilización y guerra no se oponen[22]. Solo difieren las vías a través de las cuales cada una de ellas persigue la satisfacción de la pulsion.

El  imperativo Kantiano en la guerra -que es siempre absoluta, donde lo simbólico es puesto al servicio de lo real  y, el poder del lenguaje está al servicio del goce no fálico: el del comercio interhumano- convierte a todo significante en el poder de imperativo: viva la muerte[23]

Guerra implica siempre el discurso del amo, supone la existencia de lazo social que es su condición, la civilización es la causa de la guerra. Sin embargo el discurso capitalista, verdadera perversión del discurso del amo, hace estallar los lazos sociales. Esta forma contemporánea de la violencia” define el modo de habitar y concebir el mundo.[24]. La guerra permanente se inscribe entonces entre el discurso del amo y el pseudo-discurso capitalista. El acontecimiento actual de los migrantes, se sitúa como un intento de incluirse en un discurso, como un espacio entre, en el que el pseudo-discurso capitalista hace obstáculo a esta inclusión dando por resultado la segregación y el confinamiento. Esto es, el desencadenamiento de los efectos de discurso de la ciencia ha abierto un nuevo espacio ilimitado.[25]

Los migrantes se desplazan desde lugares donde el fundamentalismo y la guerra civil tomó el lugar del Uno absoluto para el cual ya no tienen existencia, atraídos hacia la civilización europea. Esta suposición abreva en una creencia en un lugar de vacío en el que alojarse. Que por supuesto no encuentran como subraya Espósito como lugar en la comunidad.

 

La característica de la figura de la guerra permanente, es la excepción instalada como permanente.

¿Hay en la errancia de los migrantes tregua en esta guerra?

Situamos dos efectos: el niño Aylan que muere en el trayecto hacia Occidente y por otro lado el testimonio de un refugiado en Alemania, Jalil, quien dice: “finalmente este mes que hemos pasado en la ruta a pesar de los peligros,  queda como el mejor mes de nuestra vida, nos sentíamos libres, no dependíamos más que de nosotros mismos, comer bayas y dormir bajo las estrellas. Era una aventura intensa todos los días. Nos sentíamos poderosos”[26]

En la errancia puede haber una tregua, el retorno al lugar de la expulsión, un eventual asilo o la muerte.

 

Lacan en el retorno a Freud, transmite la incidencia de algo totalmente nuevo en la invención freudiana. El discurso analítico implica un lazo absolutamente nuevo, respecto de la concepción de la segregación, que se establece en el discurso del amo y en su perversión: el discurso capitalista. Ya que es el único discurso que se orienta por lo real de la segregación: el goce singular. La preocupación de Lacan, aún en su última enseñanza fue pensar la posibilidad de existencia de un lazo más allá de la segregación, no sin dejar de pensar los mercados comunes y la lógica del Campo de concentración como sus figuras.

En este trabajo el  estado de excepción, racismo, guerra permanente y, discurso configuran  un modo de pensar esta forma actual de la segregación que constituyen los migrantes, que no es más que una de las figuras  de una serie que es  la segregación, serie infinita que no cesará de iterarse. El psicoanálisis en su orientación trata la segregación desde lo real del goce singular que no hace serie, es por ello que Lacan afirma: “debemos poder acostumbrarnos a lo real[27]”.

 

 

 



[1] Diario El país 23/9/2015. Orban y el líder de Baviera se alían contra la política de asilo de Merkel.

[2] Agamben, Giorgio, Estado de excepción,  Adriana Hidalgo, Buenos Aires, 2005

[3] La Convención de Dublín (también referida como los acuerdos de Dublín o el sistema de Dublín) es una ley de la Unión Europea para racionalizar los procesos de postulación de solicitantes de asilo de acuerdo a la Convención de Ginebra. Intenta clarificar cuál estado miembro es responsable por un postulante particular, y asegurar que al menos un estado miembro tramite la postulación. Usualmente éste es el estado miembro en donde el postulante ingresó por primera vez a la Unión Europea. En 2003, la Convención de Dublín fue reemplazada por la llamada Regulación de Dublín II. Uno de los principales objetivos es prevenir que un postulante presente solicitudes de asilo en varios estados miembros a la vez. Asimismo, busca reducir el número de solicitantes de asilo "orbitantes", los que son movidos de un estado miembro a otro. Puesto que el país donde arriba por primera vez una persona es el responsable por el trámite del asilo, el sistema ha puesto una presión excesiva en las áreas limítrofes, donde los estados son a menudo menos capaces de ofrecer a los solicitantes de asilo apoyo y protección. Actualmente, aquellos que han sido transferidos bajo la regulación de Dublín II no son siempre capaces de acceder a un procedimiento de asilo, lo que pone en riesgo a los solicitantes de ser devueltos a la persecución de la cual huyen.[1]

[4] Espacio Schengen: países de Europa que firmaron Tratado Schengen de libre circulación interna.

[5] El país 11/11/15. Alemania devolverá a los sirios al país europeo por donde hayan entrado

[6] El Pais 11/11/15. Alemania levantará centros para acelerar la expulsión de inmigrantes

[7] Agamben,Giorgio, Homo sacer, Pre-textos, Madrid, 1998, pág. 18

[8] Agamben, Giorgio, Estado de excepción, Adriana Hidalgo, Buenos Aires, 2005, pág. 7

[9] Ibid pag 13

[10] ibíd. Homo sacer pág. 18-19

[11] Ibíd. pág. 157

[12] Bassols, Miquel, “El psicoanálisis no es una ciencia”,  Virtualia 9, Revista digital de la EOL, www.eol.org.ar

[13] Esposito, Roberto, Communitas, Amorrortu, Buenos Aires, 2007

[14] Ibid pag 40

[15] Agamben, Giorgio, op. Cit,  Homo sacer, pag 71

[16] Ibid Pag 43

[17] Ibid 44.

[18] Ibid, p.78

[19] Miller, J.-A., Extimidad, Paidos, Buenos Aires, 2010, p. 59

[20] Kant, Manuel, La Paz perpetua, Editorial Porrua, México, 1998, p.221

[21] Kant, Manuel, La Paz perpetua, editorial Porrua, México, 1998, p. 234

[22] Ratier, Francisco[22] El psicoanálisis a la hora de la guerra, Brousse , M-H, comp. “ La Paz es un delirio”, Tres haches, ,2015, Buenos Aires,  p.172

[23] Brousse, M-H, El psicoanálisis a la hora de la guerra, “ De los ideales a los objetos”, Tres haches, Buenos Aires, 2015, p.219

[24] Alemán, Jorge, Larriera, Sergio, Lacan: Heidegger, del Cifrado, Buenos Aires, 1996, p.172

[25] Ibid, Ratier, F., p.196

[26] Le Monde 13 /1/16

[27] Lacan, Jacques, El triunfo de la religión, Paidos, Buenos Aires, 2005, p. 92 


© elSigma.com - Todos los derechos reservados


Recibí los newsletters de elSigma

Completá este formulario

Actividades Destacadas

La Tercera: Asistencia y Docencia en Psicoanálisis

Programa de Formación Integral en Psicoanálisis
Leer más
Realizar consulta

Del mismo autor

No hay más artículos de este autor

Búsquedas relacionadas

» exclusión
» migrantes
» deshecho
» guerras
» Agamben
» Aristóteles
» zoe
» biopolítica
» estado de excepción