» Historia Viva

Aportes de autores argentinos al psicoanálisis

29/07/2004- Por Benzión Winograd -

Imprimir Imprimir    Tamaño texto:

La necesidad de optar por un conjunto determinado de autores se basa en parte en características de su producción, por la otra son los más consultados en mi tarea profesional, lo cual explica la exclusión de aportes interesantes de otros colegas, ya sea por los parámetros que he recortado, ya por una menor familiaridad personal con dichas obras.
Se tratará entonces de un breve recorrido, transitando los aportes de: Ángel Garma, Arnaldo Rascovsky, Enrique Pichon Riviere; H. Racker, José Bleger, Madeleine y Willy Baranger y David Liberman.

APORTES DE AUTORES ARGENTINOS AL PSICOANALISIS

 

 

Esquema general de esta comunicación:

1-     La prioridad será el enunciado de varios temas evitando un análisis exhaustivo para facilitar diferentes discusiones.

2-     Justificación de los criterios para la elección de los autores.

3-     Parámetros considerados en la producción de cada uno de los mismos.

4-     Estudio separado de los aportes de ocho autores.

5-     Algunas convergencias entre las contribuciones desarrolladas.

6-     Algunas características del psicoanálisis argentino. Reflexiones, críticas y propuestas.

 

Criterios para la presente elección

La necesidad de optar por un conjunto determinado de autores se basa en parte en características de su producción, por la otra son los más consultados en mi tarea profesional, lo cual explica la exclusión de aportes interesantes de otros colegas, ya sea por los parámetros que he recortado, ya por una menos familiaridad personal con dichas obras.

 

Parámetro para la evaluación de las contribuciones

Voy a formular tres perspectivas para realizar este tipo de análisis, a saber:

a)     tipo de influencia en el interior de la estructura teórica- clínica del psicoanálisis.

b)     aportes como pioneros a la extensión del psicoanálisis.

c)     rasgos y cualidades personales destacadas.

Intentaré explicar brevemente estos parámetros:

a)     se trata de creadores de nuestras disciplinas, cuya obra presenta caracteres de “universalidad”. Llamo así no a la extensión de áreas geográficas abarcadas, sino a que los aportes afectan la clínica, psicopatología, teoría de la técnica, aspectos teóricos y metodológicos generales. Por otro lado la universalidad (término que sólo pretende una ilustración y no una definición exacta) supondría también que estos aportes se extienden más allá de los discipulismos grupales, pasando a enriquecer el patrimonio teórico- clínico de la comunidad profesional, lo cual debe presuponer poder tomar las partes y no el todo de sus conclusiones siempre que se respeten las teorías básicas subyacentes.

b)     Se trata de colegas que tuvieron cualidades de pioneros, tanto por las instituciones que engendraron como por la difusión del psicoanálisis, de manera variada para cada uno de ellos, a otros campos y disciplinas.

c)     La influencia de estos pioneros, puede expresarse también por ciertos rasgos y cualidades personales importantes como modelos identificatorios para distintas generaciones de psicoanalistas.

 

 

Contribuciones de ocho autores argentinos

 

Angel Garma

a)     Entre sus contribuciones al psicoanálisis cabe mencionar: la clínica, teoría y abordaje de los sueños, con puntos de vista originales respecto a su determinismo; la comprensión psicoanalítica de distintos problemas somáticos (asma, úlcera, jaquecas); las distintas modalidades con que las estructuras superyoicas interfieren en el desarrollo del sujeto: es necesario insistir que para Garma no se trata de una fórmula uniforme, sino que diferencia variantes, ejemplificables en el modelo del engaño superyoico en la manía contrastando con las prohibiciones directas en los distintos síntomas neuróticos. Mencionaremos también sus trabajos sobre criterios de cambio y terminación, en los cuales insiste en el objetivo de los procesos psicoanalíticos de reencuentros de mayores libertades instintivas en distintos campos, que alguna vez ejemplificó con el concepto “unidad de placer”. Debemos incluir también el cuestionamiento de las interpretaciones culpabilizantes o iatrogénicas originadas tanto en dificultades individuales del terapeuta como en algunos modelos teóricos o su aplicación indiscriminada. En el mismo plano podemos enfatizar la propuesta de que cada interpretación implique algún tipo de “salida” para el paciente, posición que empalma con aquellas que privilegian el valor de la interpretación por las aperturas que genera en la mente del paciente, más que por su valor teórico intrínseco.

b)     Con respecto a las tareas constitucionales y de extensión, Garma tuvo una participación central en la fundación de APA; participó en la difusión y enseñanza en la Universidad y en distintos ámbitos clínicos académicos, así como en el desarrollo del psicoanálisis en otros países de América Latina.

c)     En cuanto al estilo personal, se trata de uno de los pioneros que combinaron la generosidad para brindar sus conocimientos y tareas, con la tenacidad para defender sus ideas (algunas de sus teorías polemizan con Freud, como la del origen traumático de los sueños) y la confianza sostenida en el valor y la utilidad del psicoanálisis.

 

 

Arnaldo Rascovsky

a)     Entre las múltiples tareas de las que se ocupó una de las más consecuentes se refiere a la indagación de los padecimientos corporales conectados con tipos específicos de conflictos psicológicos (asma, epilepsia, obesidad, trastornos endócrinos). Tras su larga experiencia como pediatra prestigioso, conecta estos problemas con las patologías familiares y su incidencia en el desarrollo del niño, preocupación que deriva en múltiples desarrollos: por un lado extensos estudios sobre el desarrollo primitivo del individuo (psiquismo fetal) y su incidencia tanto en la creatividad como en la patología (estudio de los fenómenos maníacos) por otro lado, en este mismo terreno surgen indagaciones acerca de los maltratos que las organizaciones familiares y sociales engendran en la estructura mental del niño. Arnaldo Rascovsky concluye cuestionando la importancia de la teoría freudiana del parricidio como determinante cultural, sosteniendo contrariamente el papel del filicidio como subyacente en las múltiples mutilaciones que la cultura ejerce sobre el sujeto.

b)     Esta propuesta de Arnaldo se ubica también en sectores sociales más extensos: la Universidad, los medios masivos de comunicación, las organizaciones internacionales (U.N); desde estas tribunas el postula la necesidad de captar los múltiples sistemas de mutilación ejercidos sobre el niño a través de prácticas obstétricas, pediátricas, educativas, etc. (la violencia en el parto, las nurseries, los abandonos y modelos autoritarios en la familia y la educación) los que según A. Rascovsky no han incorporado los conocimientos que pueden brindar la extensión de la comprensión psicoanalítica.

En cuanto a la acción institucional es extensa: fundador de la APA; de instituciones que han perdurado y desarrollado modelos propios como Filium y la Escuela de Psicoterapia para graduados, es fundador de FEPAL y colaborador y propulsor de múltiples sociedades latinoamericanas.

c)     En relación a lo personal se trata de un creador que resultó un paradigma de la vitalidad y generosidad para impulsar la génesis de instituciones que combinaran seriedad formativa y libertad intelectual; por otro lado mostró siempre una posición enérgica a favor de la apertura de las instituciones psicoanalíticas (por ejemplo en el caso de la inclusión de psicólogos). También insistió con la misma energía en la formación no rígida ni autoritaria y como ya lo señalamos ha sido un apasionado y consecuente defensor de la difusión del psicoanálisis en múltiples áreas de la sociedad.

 

 

Enrique Pichón Riviere

a)     Su obra ha sido un punto de partida básico para varios desarrollos en el campo psicoanalítico entre los cuales citaremos: el abordaje psicoanalítico de la psicosis; la delimitación del concepto esquema referencial en psicoanálisis (ECRO); precisiones que han permitido distintos ordenamientos en el plano teórico, ejemplificables en su formulación de las tres áreas en que se expresa la conducta (mente, cuerpo y mundo externo); articulando posturas propias y otras, producto de las obras de Freud y Melanie Klein, surge una formulación sobre la teoría del vínculo, concepción que consideramos relevante en muchos de los desarrollos teórico- clínico del psicoanálisis contemporáneo. Son destacables sus estudios sobre aspectos de la dinámica grupal, la conceptualización de los grupos operativos y las propuestas para la articulación del psicoanálisis con aspectos de la psicología social.

b)     En lo relacionado con áreas institucionales debe mencionarse que ha sido fundador de la APA; llevó al psicoanálisis a las instituciones psiquiátricas y creó instituciones que se dedican al estudio de la psicología social, formando profesionales dedicados a este campo.

c)     En cuanto a rasgos personales se trata de un creador con marcada sensibilidad para distintas expresiones culturales, muy informado y con una tendencia a tomar en cuenta distintos esquemas referenciales. Esta última modalidad puede conectarse con la influencia que ejerció sobre una generación de analistas con distintas posiciones teóricas, pero particularmente productivos en sus campos de interés: Los Baranger, Bleger, Liberman, Mom, H. Etchegoyen, J. Zac, etc.

 

 

H. Racker

a)     Si bien su producción ha sido cuantitativamente reducida, es destacable por el valor cualitativo de su obra. En efecto se trata de una de las formulaciones más exhaustivas de la teoría de la contratransferencia lo cual a pesar de lo polémico, no deja de ser un desarrollo muy importante del psicoanálisis postfreudiano. Es interesante destacar que los trabajos de Racker resultan bibliografía fundamental también en institutos no latinoamericanos lo cual no se cumple con todos los autores que hemos agrupado. También cabe mencionar que los trabajos de Racker se conectan con conceptos de Freud, con otros de la teoría kleiniana y de observaciones personales, llegándose a una teoría de la contratransferencia que permite un espectro amplio de alternativas clínicas.

b)     Si bien Racker no fundó instituciones, fue invitado habitual a institutos extranjeros (Clínica Menninger, por ejemplo) y es autor clásico en diferentes zonas geográficas.

c)     Con respecto a lo personal, se lo describió como persona con marcados talentos y sensibilidad artística y una muy rica formación intelectual global.

 

 

José Bleger

a)     Sus publicaciones no son cuantitativamente extensas, pero abarcan de manera relevante todos los planos que intentamos esquematizar. En el clínico formula la diferenciación entre los sectores neurótico y psicótico de la personalidad, apuntando a ordenar un campo complejizado por la extensión de problemas clínicos y psicopatológicos enfocados por el psicoanálisis. Esta contribución combina el respeto por la discriminación de los planos clínicos y teóricos con el esclarecimiento de los esquemas referenciales subyacentes. A su vez aporta modelos originales histórico genéticos basados en lo que el llama: etapas indiferenciadas del primitivo desarrollo humano, con énfasis en el modelo de la simbiosis y sus conflictos. Resultan importantes sus propuestas de agrupar los indicadores clínicos de ambas estructuras; lo mismo aquella que propone cuestionar lo que él llama residuo de los modelos médicos de diagnóstico y curación en psicoanálisis y reemplazarlos por lo que denominó nosografía estructural y su muy lúcida y original clasificación de los objetivos terapéuticos. En los planos teórico y metodológico tuvo también contribuciones relevantes polemizando con las críticas marxistas al psicoanálisis y también discutiendo las teorías instintivas y el narcisismo en Freud (quiero subrayar que estas últimas críticas que para nada comparto, son indicadoras da la actitud intelectual independiente que fue una de sus características).

b)     Con respecto al plano institucional comentaba M. Baranger en homenaje a Bleger en años recientes “el lugar de José Bleger en la historia del psicoanálisis en la Argentina es absolutamente único. El abrió puertas no solo hacia la universidad, sino también a toda una parte de la intelectualidad argentina y también hacia oras disciplinas científicas”. Se trata de aludir a tareas de Bleger en la carrera de Psicología, en sus reflexiones sobre el rol del psicólogo, de las limitaciones del psicoanálisis frente a las múltiples necesidades terapéuticas en el campo de salud mental, pero también en su papel relevante como espacio para la investigación psicológica.

c)     En lo personal se trataba de una persona culta y compleja y como lo señalara también M. Baranger “su vida se presentó como una lucha constante por superar contradicciones. Los amigos lo llamaban cariñosamente el rabino rojo; intentaba compatibilizar dimensiones tan complejas como su identidad judía, su ideología marxista y su adhesión al psicoanálisis”. Quizás este término “luchador” es uno de los que más resume la modalidad personal de este creador.

 

 

Madeleine y Willy Baranger

a)      Se toma la obra de estos colegas en conjunto, pues los trabajos que enfatizamos se realizaron en colaboración. En particular se trata de acentuar las reflexiones sobre lo que llaman “campo psicoanalítico”. Este intento de categorizar la clínica psicoanalítica puede constituir un aporte importante para una teoría abierta de la clínica que permita la inclusión de variantes psicopatológicas y de distintos esquemas referenciales, y no superponer solo clínica con exposición de material. Este modelo se complementa con otros acerca de contenidos y características de campo, las nociones de baluarte, el estudio del proceso en sus aspectos modificadores o detenidos así como la relación entre temporalidad y material analítico. En cuanto a los planos teóricos y metodológicos, han tenido una importante tarea en cuanto a discriminar los aportes de diferentes esquemas referenciales. Así pudo accederse a formulaciones claras de aspectos de la teoría kleiniana junto a reflexiones críticas hacia algunos de sus conceptos. Otro aporte consistió en la introducción reflexiva y crítica de las posturas del estructuralismo francés, en particular parte de la obra de Lacán. Resulta interesante y original la manera en que W. Baranger junto a Jorge Mom reflexionan sobre lso esquemas referenciales citados, sus aportes y también limitaciones en el relato sobre “corrientes actuantes del psicoanálisis en América Latina”.

b)      En cuanto a la vinculación con lo institucional se trata también de pioneros que han organizado una de las instituciones latinoamericanas la Asociación Psicoanalítica Uruguaya.

c)      En lo personal es importante resaltar el estilo de pensadores de distintos problemas, con una actitud que combina la no evitación de la crítica con el rescate de lo que consideren aportes positivos de los diferentes esquemas referenciales. Esta modalidad, más allá de los acuerdos que puedan existir o no con los autores, puede funcionar también como identificatoria para determinado desarrollo del psicoanálisis en nuestra comunidad.

 

 

David Liberman

a)     Considerado por sus contemporáneos uno de los analistas más originales y creativos, resulta paradojal como aparece reducidamente en bibliografías. Tal vez una de las múltiples causas posibles consiste en su rechazo a “cerrar” su propia obra, por su actitud de constante conexión con distintos campos de las ciencias humanas. Podría definirse como una de las perspectivas centrales de su obra la necesidad de conceptualización, desarrollo y redefinición del campo clínico del psicoanálisis. Debe quedar claro que no se trata de un reduccionismo a lo clínico conductístico, sino de propuestas con alcances teóricos, técnicos clínicos y metodológicos. Según Liberman el método terapéutico analítico tiene propiedades que exceden las de la mera aplicación, para constituir un campo original de redescubrimiento y articulación con los planos explicativos. Para respetar la necesidad de síntesis enunciaré tan solo los títulos de algunas de sus contribuciones:  

Redefinición de la transferencia como expresión de modalidades psicopatológicas y          

solo como reedición de imagos.

Nuevas propuestas para el abordaje interpretativo: se trata de jerarquizar la forma y no solo el contenido, culminando en la formulación de un modelo llamado “complementario” que sostiene que para su operatividad, la interpretación psicoanalítica debe llenar ciertas condiciones en función de las estructuras psicopatológicas dominantes de los integrantes de la pareja terapéutica.

     Delimitación, estudio y captación de indicadores del proceso analítico usando como       

     auxiliares modelos de otras disciplinas (semiótica, teoría de la comunicación y      

     lingüística).

     Estudio de los factores de cambio en psicoanálisis redefiniendo el concepto de     

     “funciones yoicas” agregando a los objetivos clásicos, el de la aparición de nuevos     

     funcionamientos creativos de la personalidad.

Jerarquización de la relación bipersonal en el campo clínico: sostiene que cada proceso terapéutico tiene problemáticas diferentes, que también dependen de la mencionada relación (surge el concepto de “pareja terapéutica”) y también cabrían soluciones diferentes en cada proceso. También cabe enfatizar la posición metodológica de Liberman que llamaré “operacionalista” consistente en relativizar el valor absoluto de cada teoría o escuela sosteniendo que las teorías deben ser utilizadas como modelos, cuyo valor estará expresado por adecuación al abordaje de problemas clínicos. Congruentemente con esta postura sus trabajos incluían aportes de Freud, autores clásicos como Fenichel, Abraham y Melanie Klein, así como nociones de otras disciplinas.

b)     Sus tareas institucionales fueron amplias, dictó durante años el curso de Psicopatología, tuvo múltiples conexiones con instituciones médicas y psicológicas; estudió con epistemólogos y lingüistas. También fundó APdeBA, institución psicoanalítica que nace en 1977, y ADEP dedicada a los problemas epistemológicos del psicoanálisis junto a un grupo de psicoanalistas y epistemólogos.

c)     En lo personal fue proverbial la modestia, sencillez y afecto con que se conectaba con los colegas de cualquier generación, y su entusiasmo por captar los matices personales de cada ser humano en los distintos procesos terapéuticos.

 

 

Posibilidades de convergencia entre las contribuciones mencionadas

A través de la somera síntesis realizada pueden surgir reflexiones generales que muestren en grados variados una influencia importante en los tres parámetros recortados. Distintos sectores de la interioridad de nuestra disciplina; la organización y extensión creando instituciones psicoanalíticas y psicoterapéuticas y realizando tareas asistenciales y docentes universitarias. También surgen características personales como maestros y pensadores aportando aperturas y rigor intelectual y con modelos originales de concepciones clínicas y teóricas. Pero podemos intentar captar convergencias parciales o generales más específicas que serán también solo esquemáticamente enunciadas.

 

1)     Interés marcado en el campo clínico del psicoanálisis con distintas líneas de aportes (Garma examinando múltiples aspectos de la interpretación, Rascovsky estudiando los fenómenos maníacos y las identificaciones familiares, Pichón Riviere los fenómenos psicóticos, Racker formalizando la contratransferencia, Bleger con un prolijo armado de los indicadores diagnósticos y entrevistas; los Baranger y David Liberman armando una conceptualización general y particular de la experiencia clínica y este último proponiendo distintas reformulaciones del abordaje terapéutico).

2)     Laxitud en el uso de los esquemas referenciales: observamos que es frecuente que estos autores utilicen como fuentes teorías o escuelas únicas; esta modalidad laxa es asumida más explícitamente en algunos (Bleger, los Baranger, Liberman), apareciendo en los dos últimos como posición metodológica aunque con modalidades distintas.

3)     Interés en los problemas somáticos: fueron mencionados como factor común en los estudios de los pioneros iniciales (Garma y Rascovsky), y continúan con distintos desarrollos en Bleger y en los estudios de Liberman y varios colegas acerca de la personalidad sobreadaptada.

4)     Compatibilización de algunos aportes en convergencias más específicas: aclarando la coincidencia con un trabajo anterior de César Merea en cuanto a lo inconveniente de postular la existencia de una “escuela” argentina, creemos sí que varios de los aportes citados podrían utilizarse para diseñar modelos abiertos de características de la experiencia clínica en psicoanálisis. Me refiero específicamente a los estudios de los Baranger sobre el campo y proceso psicoanalítico, las teorías de Liberman sobre indicadores de cambio y estudios de las sesiones como el marco más general de ese diseño. En cuanto a los distintos aspectos particulares resultan interesantes los modelos diagnósticos y objetivos terapéuticos de Bleger; el espacio de registros contenidos en la teoría de la contratransferencia formulada por Racker. En cuanto a la jerarquización de tipos de material clínico, enfatizaría los aportes de Rascovsky examinando las identificaciones familiares en relación a la patología del sujeto y los de Pichón Riviere en cuanto a la importancia de las estructuras vinculares en la clínica psicoanalítica actual. Con respecto a los problemas de abordaje pueden complementarse las propuestas de Garma, Bleger y Liberman, ya enunciadas en el curso de la exposición. Sin pretender una total uniformidad, la construcción de estos modelos permitiría generar diálogos sobre la experiencia clínica con algunos aspectos compartidos y con diferencias psicopatológicas y de esquemas referenciales.

 

Algunas de las características del psicoanálisis en Argentina

En función de la necesidad de síntesis bosquejaré sobre algunos temas.

1)     La difusión del análisis en nuestro medio: se trata de un fenómeno complejo del cual se mencionarán solo dos aspectos: el primero referido a los valores positivos de la extensión vinculable con lo que fue descrito como actitud y posición conceptual “abierta” de los pioneros; el segundo se refiere a matices más problemáticos: por un lado el surgimiento de múltiples técnicas psicoterapéuticas vinculadas, derivadas o contradictorias con el psicoanálisis, y por el otro la aparición de grupos psicoanalíticos que por sus posiciones teóricas e ideológicas se ubicaron fuera de la IPA. Esta segunda extensión plantea interrogantes sobre la posibilidad y utilidad del intercambio entre instituciones y esquemas tan diferentes; al respecto quiero citar al colega César Merea cuando señala dos riesgos: “el de una teoría ‘monolítica’ que no permitiría incorporar nuevas ideas y realidades; pero también el de una ‘diversidad’ estancada de teorías que podría llegar a confusión de lenguas y sucesivos apartamientos grupales”.

En el mismo sentido resulta convincente lo que proponen Baranger y J. Mom en su relato sobre corrientes actuantes, en cuanto a que las instituciones “alberguen” distintas corrientes para asegurar un pluralismo científico en la relación entre esquemas referenciales.

2)     La relación entre el psicoanálisis argentino y su desarrollo fuera de América Latina: se trata también de problemas y causas complejas, pero puede sostenerse que en la relación que examinamos  hay una clara asimetría entre las “entradas” y “salidas”. En efecto observamos que la inclusión de los autores aquí estudiados en bibliografías no latinoamericanas es muy escasa (salvo los pioneros Garma y Rascovsky). La dirección inversa en cambio presenta una circulación amplia, lo cual resulta útil e interesante por la posibilidad de acceder a múltiples formas de conocimiento en psicoanálisis y el valor del pluralismo antes comentado. Pero también cabe reconocer la tendencia a la “sacralización” de escuelas y “modas” al respecto (antes las teorías de M. Klein ahora las posiciones Lacanianas) y en el otro polo el rechazo indiscriminado a los aportes estadounidenses.

3)     La crisis del psicoanálisis en nuestro medio: como se trata de un término con múltiples significados posibles, intentaré algunas precisiones en los siguientes temas:

a)                 Disminución de la demanda del psicoanálisis método terapéutico dentro de los parámetros clásicos: se trata de una cuestión que tan solo cabe enunciar, pues escapa a las posibilidades de síntesis de esta comunicación.

b)                 Las posibilidades de “dilución” frente a la profusión de psicoterapias derivadas o contrastantes: en la compleja cuestión de las relaciones entre psicoanálisis y las psicoterapias, entendemos que mantiene un valor parcial la postura de Bleger sosteniendo la insuficiencia del psicoanálisis para resolver las múltiples necesidades de la salud mental. Cabe entonces proponer una relación complementaria en cuanto a la utilidad de distintos modelos psicoterapéuticos para las múltiples emergencias posibles, enfatizando el valor del psicoanálisis como método terapéutico y también como fuente de investigación y realimentación teórica en su propio campo y el de la salud mental en general.

c)                 La incomunicación entre distintos grupos o escuelas: ya fue comentado n un apartado anterior, cabe reiterar la posición que propone para las instituciones psicoanalíticas espacios e intercambios para todas las corrientes, teniendo como eje la articulación con la clínica. Debe reconocerse que se trata de un ideal muy poco alcanzado ya que los intercambios son interferidos por múltiples circunstancias que incluyen los juegos de poder, pero también la creación de dialectos y lenguajes difíciles de compatibilizar o discriminar entre sí.

d)                 Las crisis por insuficiencias internas, insuficiencias críticas y estancamiento teórico- clínico: en este aspecto cabe resaltar lo que entendemos por dificultades para el intercambio en el interior de nuestra disciplina (no se limita a nuestro medio, sino que es frecuente en congresos y reuniones internacionales). Revisando discusiones puede concluirse que tanto los acuerdos como las polémicas no resultan claros, en función de malos entendidos, intereses de poder o lazos afectivos que no se discriminan de las diferencias conceptuales. En otro plano existen a veces dificultades para incorporar nuevos modelos teóricos- clínicos: esto lo señala Kohut cuando afirma que “el objetivo del psicoanálisis es el estudio de la mente humana y no el de la obra de Freud, que puede resultar un instrumento privilegiado para ello”.

Si bien estas dificultades no parecen fáciles de solucionar, creemos que reconocerlas y discutirlas puede constituir nuestro aporte a una apertura que los pioneros desarrollaron en tantas direcciones.

 

Nota: el autor Benzión Winograd, es

- Miembro fundador, vocal titular y coordinador científico de SAP.

- Profesor y miembro consejo académico AEAPG- Universidad de la Matanza

- Fundador de ADEP (Asoc. de Epistemología del psicoanálisis)

- Coautor del Libro: Grandes psicoanalistas Argentinos- Lumen 2001

- Trabajos Psicoanálisis Rioplatense Rev. SAP 2002, Fundamentos del psicoanálisis Panel Rev. AEAPG Nº 27, año 2001

 

 Su mail: bwinograd@movi.com.ar

 

 

 

 

BIBLIOGRAFIA

Se trata de una bibliografía referida a los distintos comentarios generales de esta comunicación, no así a los contenidos específicos de la obra de los autores estudiados.

-          ARMINDA ABERASTURY; MARCELO ABERASTURY; FIDIAS CESIO “Historia, enseñanza y ejercicio legal del psicoanálisis” Ed. Bibliográfica OMEBA; 1967.

-          Carlos M. ASLAN; E. SUSANA LUSTIG DE FERRER; BENZION WINOGRAD “Intervenciones en el homenaje a Bleger” versión grabada APA.

-          WILLY BARANGER Y JORGE MOM “Corrientes actuantes en el pensamiento psicoanalítico de América Latina” relato oficial XV Congreso Psicoanalítico de América Latina Bs. As.; 1984.

-          DEPARTAMENTO DE HISTORIA DE LA APA “Asociación Psicoanalítica Argentina 1942- 1982”.

-          ELIZABETH G. DE GARMA; L. ALLEGRO; A. ARBISER; E. S. LUSTING DE FERRER; A. GIOANNINI; T. SCHLOSSBERG; F. WEISSMANN; J.WINOCUR; N. YAMPEY; S. ZUSMAN DE ARBISER “Corrientes actuantes en el pensamiento psicoanalítico de América Latina” actas XV Congreso Psicoanalítico de América Latina Bs. As. 1984.

-          ANGEL GARMA “Mis investigaciones psicoanalíticas originales en el transcurso de 45 años”. Rev. de psic. Nº1- 2 tomo XXXI año 1974.

-          C. CESAR MEREA “El futuro del psicoanálisis en América Latina” Rev. de la Esc. de Psicoterapia para graduados Nº 10 pags. 87- 98, 1984.

-          C. CESAR MEREA “Convergencia de teorías en psicoanálisis” Ponencia oficial XVI Congreso Latinoamericano de psicoanálisis. México 1986.

-          ARNALDO RASCOVSKY “Esquema autobiográfico” Rev. de Psic. Nº1- 2 tomo XXX año 1974.

-          BENZION WINOGRAD “Esquema referencial: concepto, usos y alcances” Actas XI Congreso Psicoanalítico Latinoamericano de Psicoanálisis. México 1986.

Revistas dedicadas (números de homenaje)

-          JOSÉ BLEGER: Rev. de Psic. Nº2 vol. XXX; 1973.

-          DAVID LIBERMAN: 1) Psicoanálisis (APdeBA) Nº1- 2 vol. VII; 1985.

2) Revista Asociación Escuela Argentina de Psicoterapia para graduados Nº12; 1985.

- ENRIQUE PICHÓN RIVIERE: Rev. Uruguaya de Psic. Nº58 y 59; 1978.

 


© elSigma.com - Todos los derechos reservados


Recibí los newsletters de elSigma

Completá este formulario

Actividades Destacadas


Del mismo autor

No hay más artículos de este autor

Búsquedas relacionadas

No hay búsquedas relacionadas.