Psicoanálisis<>Filosofía


por Silvia Bermúdez
Un interés particular en lo concerniente a los niños trans, me interroga sobre qué lugar para la invención en “ese no saber qué son”, como afirma Lacan respecto del hombre y la mujer. Género y sexuación no se corresponden ni se complementan; la anatomía no es el destino, no hay determinismos, la sexuación, sabemos, no pasa por allí. Es a partir del libro “Yo nena yo princesa, Luana la niña que eligió su propio nombre”, que se perfilan interrogantes respecto del efecto de la ley de identidad de géneros en la infancia. ¿Lo trans en la infancia, como nuevas formas de presentación, responderían a los avatares del niño como fragmento de real, sin encarnadura, en el siglo XXI? ¿Con la ley de identidad de género, se encontraría algún anclaje?
por Julio Riveros
Nuestra idea es hacer un abordaje del texto “De la esencia de la verdad”, desde el arte o, mejor dicho, desde consideraciones que podríamos enmarcarlas dentro de la estética. Consideramos que este texto no es sólo una revisión minuciosa del problema de la verdad y su impacto en la pregunta por la posibilidad del conocimiento, sino que el mismo nos conduce hacia una salida que se puede plantear en términos propios del campo de la estética. Se presentan tres modos de aproximarnos al problema de la verdad, recurriendo al pensamiento de Heidegger. Quizás lo que tengan en común sea la metafísica que las atraviesa. La modernidad en el primer caso, la poesía como práctica estética emancipadora respecto a una modalidad abusiva del poder político en el segundo y en la tercera el despliegue impúdico de esa maquinaria capitalista al servicio de la voluntad de poder contemporánea, que en verdad, se trata de una voluntad de opresión. Quizás el discurso filosófico aporte nueva luz sobre este estado de cosas, una luz que des-oculte una versión del ser que no haga de la pulsión de muerte su horizonte.
por Ana Wiener
En este texto, la autora trata de bordear algunas preguntas que atañen a las diferencias entre la otredad del goce, el espacio del mismo, y la diferencia que esto supone respecto al así llamado "Super Yo femenino", con el espíritu de navegar entre nociones que siguen siendo parte de su investigación. La intersección entre compacidad e infinitud es la hipótesis de base del presente trabajo. Fundamentar la heterogeneidad del goce Otro implica no dejarse guiar por la mera intuición, sino hacer el recorrido que permita arribar a cuestiones de suma complejidad. La retórica y la lógica sirven de acompañamiento al artículo en cuestión.
por Julio Riveros
La lógica de la racionalidad contemporánea impone el ascenso del objeto a al cenit de la civilización −como señaló J.-A. Miller− dejando al sujeto evaluado, clasificado. Es necesaria una práctica que nos oriente hacia un nuevo territorio del ser diciente, que habite una democracia cuyo fundamento no sea el desamparo hipermoderno. La salida por el síntoma.
por Ana Wiener
La autora trae la referencia de los estoicos y la categoría de incorporal, a partir de la cual recorre las nociones de libido freudiana, el mito de la laminilla, el objeto al que Lacan vincularía con dicha categoría estoica. Su itinerario arriba al vínculo que el significante establece con el goce que permite a Lacan presentar, en Aún, la sustancia gozante. Esto nos lleva al concepto del cuerpo en Psicoanálisis y lo que del goce atañe al mismo, en tanto repetición.
por Sara Vassallo
Si es indubitable que Lacan es ateo, eso no quiere decir que lo sea. Toda su insistente ironía en contra de deístas, ateos, nietzscheanos o libre-pensadores, se centró siempre en argumentar que “Dios” como significante remite a un Real imposible de eliminar. En otras palabras, la negación del ateo: "Dios no existe", no anula la afirmación contraria (Dios existe), más aún, equivale a una denegación, ya que un núcleo ciego, ligado con el “Padre muerto”, subsiste más allá del sí o del no (el Padre muerto no dice nada, ni siquiera sabe que murió, situándose en un punto de interrupción del mensaje y la significación). La cuestión reside, claro está, en saber qué tipo de ateo surge de una lógica donde sí y no se superponen sin excluirse. Responder a este interrogante implicaría seguir paso a paso diferentes momentos de la enseñanza de Lacan. Pongo aquí solo un ejemplo de su última fase, en un momento en que la relación al Padre fue formulada como: “Prescindir del padre a condición de hacer uso de él”. De un modo similar, también podría decirse de su ateísmo: “Prescindir de la religión a condición de hacer uso de ella”. Se dirá: ¿hacer uso de qué en ella? De un Padre dador de ley y sentido, mejor dicho, de un Nombre-del-Padre (expresión ya formulada en el relato religioso judeo-cristiano).
por Viviana Hanono
El sentimiento de desposesión citado por Lacan en el Seminario de10, La angustia, las consideraciones que hace J. A. Miller en torno a la angustia lacaniana, y su remisión a lo siniestro freudiano orientarán mi trabajo. Elegiré como objeto de análisis, en el campo de la literatura fantástica, a la novela- cuento, “El Horla” de Maupassant, tomando en consideración, algunos de los aspectos que desarrolla T. Todorov en Introducción a la literatura fantástica; y aportes de E. Trías en Lo Bello y lo Siniestro.
por María José Rossi
María José Rossi interroga la siempre vigente problemática acerca de la identidad – diferencia americana. Buscando superar la lógica binaria y, sin caer en la versión fácil de la dialéctica que procuraría una síntesis armoniosa de los opuestos, explora una lógica (afín al Psicoanálisis Lacaniano) que admite la contradicción interna y señala el punto de imposibilidad donde se sostiene la tensión, en la profunda búsqueda de construir una hermenéutica para América Latina.
por Valeria Petruzzi
La autora explora la temática del amor, poniendo en tensión los pares identidad y diferencia, la verdad del Dos y el Uno fusional, en un recorrido que parte de Badiou y pasa por Freud y Lacan. En su itinerario ubica, desde la lógica que implica la “no relación sexual”, cuál es la búsqueda que se pone en juego en el amor a nivel del sujeto del inconsciente.
por Irene Eizykovicz
La transmisión del psicoanálisis: la lectura como dificultad. Entrenarnos en el arte de la lectura. En la enseñanza freudiana, lo que se llama un ejemplo, lejos de ilustrar, acude para presentar una dificultad o incluso un fracaso. ¿Qué se transmite? De la ficción al estilo. Religiosidad: ¿lacanianos?