Lecturas

por Luciano Lutereau
Con una propuesta que recuerda la presentación en formato de libro de Literal, Ancla se expone como un objeto extraño, de cuidado diseño y riguroso proyecto editorial. En una línea que la emparienta con Sitio, sus artículos exponen un elaborado trabajo de escritura, de gusto por la palabra que decanta en pensamiento. En la estela de Conjetural, Ancla es una revista de polemistas. En sus tres números se encuentra el proyecto de transformación de la teoría psicoanalítica a partir de la discusión de lo dado, con una política inequívoca –el realismo nodal de Lacan– que confronta el nominalismo y el historicismo imperante en los ataques del psicoanálisis.
por Alberto Santiere
Este libro, ¿nos habla de cierta circularidad inmanente al protagonista que tiñe su existencia? En palabras del escritor: “Amurado en un tiempo sin fin”… “No basta que me sienta encerrado, siempre hay otro encierro que antecede”. La trama, ¿sugiere un conjuro del autor que desde la prisión de un ascensor introduce al personaje en un "descensor" al infierno sotánico de lo humano? Tensión, humor, absurdo, reveladores monólogos interiores, y personajes amalgamados habitando un destino, nutren estas páginas. “Soy lo que hago, escritura” –escribió Cerruti en su primera novela–... ¡y qué bien que Es!
por Juana Goldfinger de Gutman
Lo que nos precede como tesoro al que advenimos como personas es el universo del lenguaje, las palabras dichas, los arrullos cantados, los deseos, los ideales, los afectos familiares que nos marcan y nos dan marco.Ahora bien, ¿de qué hablamos, en musicoterapia, en psicoanálisis, cuando nos referimos a la angustia, a las inhibiciones, a los síntomas psíquicos o físicos, sino a lo que hace al sufrimiento de quien se acerca a consultarnos?
por Juan Cruz Martínez Methol
Una estética de la mirada se encuentra en el horizonte de este estudio que nos propone Luciano Lutereau, que toma como punto de partida y expone las consecuencias de esa decisión de Lacan en Aun que dice “me coloco más bien del lado del barroco”. Su hipótesis: la relectura de lo imaginario en Lacan en los años ’60-’66 mediante la introducción de la noción de objeto a, permite afirmar que esa noción se formaliza de acuerdo a un modelo extraído de una hermenéutica de imágenes. El concepto de objeto a por lo tanto es la puerta de entrada a la crítica del psicoanálisis aplicado al campo del arte. Tal paradoja implica que “el psicoanálisis mismo encierra en uno de sus articuladores fundamentales una teoría del arte”.
por Silvina V. Garo
El encuentro “posible” entre un hombre y una mujer, o las posibilidades a las que se arriba al final de un análisis -el recurso a la sublimación y una estética del goce femenino-, son algunas de las propuestas interesantes que se nos plantean en este libro, todas ellas a condición de un trabajo previo, la subjetivación del goce. Si puse el énfasis de mi comentario en el apartado “¿Qué es un análisis?”, es porque pienso que ése es el hilo rojo que atraviesa todo el libro…
por Silvia Ons
El libro de Sergio Zabalza excede la temática de la neoparentalidad, abordada con riqueza en sus páginas, ya que desembroza todos los prejuicios que los psicoanalistas mantienen sobre dicha problemática. El autor analiza con agudeza la manera en la que los ideales normativos se infiltran en la forma en la que se tratan las cuestiones relativas a las identificaciones sexuales, y olvidan lo más subversivo del psicoanálisis. Este libro es clave para pensar de manera seria, sin prejuicios, con un estudio detallado sobre la bibliografía sobre el tema, a las neoparentalidades abordadas desde la perspectiva del “porvenir de la diferencia” Tal perspectiva nos conduce a poner en cuestión que el matrimonio sea igualitario aún en sujetos del mismo sexo anatómico. “La diferencia-dice el autor-es ética” Fecha: cuándo esté...
por Juan Vasen
Marcela nos presenta su testimonio novelado como una bitácora, el relato de una navegación que por momentos avanza a plena vela pero que en otros debe enfrentar cantos de sirena, arrecifes y encalladuras. El barco está a punto de desalojar a sus tripulantes en varios momentos, enfrenta motines familiares y la tentación de arrojar su carga al mar. Pero esta expulsión es detenida por la ética de su capitana... Pocas veces un historial reflejó con más precisión este contraste.
por Roberto Mazzuca
Héctor concluye proponiendo que “Lacan dice la verdad reprimida de Heidegger”. Para llegar a esta proposición de una manera amplia y pormenorizadamente fundada, Hace un trabajo no tanto de alfarero como de tejedor, para usar figuras que tienen presencia en la obra de quienes hablamos. Pero un tejedor que tiene que pasar sus hilos por surcos estrechos, evitando en cada momento el riesgo de inclinarse hacia un lado o hacia otro. Un balance permanente entre qué hay de común y qué de diferente.
por Pablo Fridman
Es imposible no escuchar música (…) Es un instante que bordea la palabra, de un modo que emplaza lo pulsional. Se trata de un momento donde el orden de lo simbólico se excede a sí mismo, y requiere de la desaparición del sentido, hacia una pura sonorización. ¿Puede el analista hacer oídos sordos a esto? ¿Puede dejar el campo musical por fuera de su escucha o de su análisis (con toda la connotación que resuena en esta palabra)?
por Sergio Zabalza
Poesía en el hospital. A poco que reflexionamos, no podría ser de otra manera. El poeta toma su material de la escoria, de los restos que la civilización deja caer en su incesante y voraz trajinar para, con ellos, hacer belleza. No en vano, José Agustín Goytisolo considera a los poetas como ¨aquellas viejas prostitutas de la historia¨, siempre atentos a lo que se escribe en los márgenes... Hay analistas en los hospitales, nuestra escucha vive en los márgenes, en las orillas del discurso convencional, en aquello que no funciona, en ese espesor que la corriente, por distraída, deja en el olvido hasta que el barro lo cubre y la raya clava su aguijón. Así, cuando algo deja de funcionar aparece la rayadura del síntoma, la fiera, su herida... La raya de la que habla Manzini marca en el alma, en ese cuaderno de Bitácora que llaman la psiqué.