Lecturas

por Jorge M. Helman
Este volumen viabilizado en Argentina por Amelia Imbriano, da cuenta de miradas complementarias que cuestionan y facilitan repensar aspectos centrales de la posición del psicoanalista. Valga el punteo que realiza Jorge Helman para interiorizarse del recorrido medular que plantean los tres autores de “El oficio del analista” y aproximarse a la propia lectura…
por Natalia Neo Poblet
Estas conversaciones mantienen una tensión entre lo académico y la experiencia de cada uno desde Alejandra. No la voy a nombrar Pizarnik, porque creo que ellos decidieron escribir desde lo que Alejandra despertaba en ellos. Entonces, podemos decir que estas conversaciones mantienen una tensión entre lo académico de Pizarnik y la experiencia de cada uno de ellos con Alejandra, y a la vez oscilan entre una complicidad, un despertar y un compartir. Ellos se encargan de no escribir sobre Alejandra, sino desde Alejandra.
por Sergio Zabalza
Entre las numerosas y estimulantes resonancias que el libro de Rebeca despertó en mi lectura elijo mencionar en primer lugar la cuestión del trabajo con los padres. No sólo en las entrevistas sino en la clínica de los practicantes, esto es: en las consideraciones, cálculo y discusiones del equipo. De hecho una de las riquezas del libro reside en que su texto alberga distintas posiciones en el delicado tema del lugar de los adultos en el tratamiento de niños y adolescentes.
por Nora Merlin
Es necesario diferenciar el sujeto sexuado y mortal efecto del significante en el cuerpo, de la subjetividad epocal: una moral universal que implica la producción de una nueva subjetividad, la realización de un hombre nuevo formateado por la moral empresarial y los imperativos de consumo ilimitado. Esta producción de subjetividad es el mayor triunfo de la nueva mutación del capitalismo: el neoliberalismo.
por Cinthia Chufeni, Silvia Ambrosini y Annelie Barea
Hace un tiempo que, con Annelie Barea y Silvia Ambrosini, nos reunimos a leer y a conversar sobre la clínica con jóvenes. Y así nos topamos con un libro anterior de Sergio: “El lugar del padre en la adolescencia”. Precioso y preciso. Aquel libro, tan ameno, insinuaba un tono que ahora se confirma y se despliega. Y es el de su autor, que, además de ser un psicoanalista que escribe, tiene una forma muy particular de hacerlo; una forma y muchos formatos. Leerlo no es solo tener sus libros, también es encontrarlo en las redes sociales, recibir artículos por Whatsapp, leerlo en los diarios, en sitios de internet y en todas las copias en papel que él te va pasando. Lo que está claro es que siempre tiene un tono que se reconoce, “un tono que despierta”.
por Claudia López Neglia
"Una variedad de ejemplos testimonian el hilo que recorre todo el libro: Si la pubertad es la etapa en que un sujeto constituye su cuerpo, el cuerpo social se constituye a partir del sujeto adolescente, dentro de un contexto donde la farsa del libre mercado, con su empuje al goce, somete a los actuales jóvenes a ser productores de bienes, modas y servicios, y a un consecuente culto del yo en detrimento del lazo social y el encuentro de los cuerpos"...
por Nicolás Cerruti
Los relatos de Manuel insisten de la manera más simple posible en lo mismo. Y por eso producen algo nuevo, que estaba ahí pero no lo veíamos. Leía La confusión y volvía una y otra vez a estar ahí, en esos pasillos, en esas salas, en esas camas. Manuel abre las puertas del nosocomio aunque digan que están abiertas. Y tan abiertas están que ya no se sabe por dónde salir.
por Demián Bucay
Fiel a su propuesta, Rehin demuestra que en los márgenes de la cultura y de la teoría también se puede analizar. Lo que lo sostiene allí, sin embargo, no es una vocación de sacrificio ni son los supuestos nobles ideales de la tarea terapéutica. No es caridad ni benevolencia. Rehin no es un “buen tipo” (aunque lo sea). Lo que lo sostiene allí es una apuesta.
por Eva Lerner
La tarea de presentar un libro post mortem tiene para mi algo de transgresivo, sobre todo porque cuando le insistíamos a Carlos de que publicara, que editara un libro de topología psicoanalítica, de “topologería lacaniana” y de lógica para psicoanalistas, él prometía hacerlo cuando tuviera tiempo. (…) Hoy celebramos la aparición de un libro suyo para el que, en su memoria, trabajaron arduamente su esposa Ilda y sus hijos Sofía y Diego. Nuestro agradecimiento va a ellos, a Carlos Marcos, nuestro bibliotecario por el hermoso prólogo y a la Escuela, por la dedicación para editarlo.
por Sergio Zabalza
Prestigiosos colegas desarrollan sus pensamientos y abordajes clínicos en esta obra compilada por Gustavo Bertran. La experiencia del Hospital de día, tal vez sea una de las más plenas formas de intervenir al rescate de la singularidad, del alojamiento del sujeto. En pos del devenir posible para el psicoanálisis, esta lectura funda una huella que merece ser transitada por los lectores...