Colaboraciones
por Graciela Ana Pérez
La guerra como forma de presentación de lo traumático invita a considerar la noción de trauma. Entendido como acontecimiento, el trauma se ubica como un episodio externo a la estructura, capaz de suscitar "los afectos penosos del horror, la angustia, el dolor psíquico". Acontecimiento contingente, irrupción de un Real, encuentro azaroso con la posibilidad de muerte. De la sensibilidad del sujeto afectado dependerá que dicha vivencia se haga valer como trauma.
por Roberto Harari
La tragedia de Diego Maradona -y digo así porque se trata de un héroe, intentaremos fundamentar por qué cabe denominarlo así- cuya trayectoria vital lo ha ido acercando paulatinamente al encuadramiento característico propio de un héroe trágico. Véase, en ese sentido, cómo coincide la siguiente semblanza inicial postulada por Lacan con la trayectoria personal del conocido ex futbolista: "[.] el héroe de la tragedia participa siempre del aislamiento, está siempre fuera de los límites, siempre a la vanguardia (en flèche) y, en consecuencia, arrancado de la estructura en algún punto".
por Claudio Deluca y Ximena Calleja
Cuando nos referimos a asociar libremente, deberíamos pensar en una libertad condicionada, condicionada por la estructura del lenguaje, el cual imposibilita que todo pueda ser dicho. Que se digan palabras de manera azarosa con cierta libertad no nos permite a los analistas captar su relación con el goce -por lo menos en un primer momento-, esa captación será un trabajo a producir con el devenir del análisis.
por Julio Moscón
Una vez que el analizante se deja llevar por la asociación libre, descubre muy pronto lo que ya era un presentimiento dictado por su malestar. Me refiero a que se encuentra ineludiblemente con esa red significante que lo tiene atrapado, con esos caminos y rodeos que paradójicamente transita, a pesar de que lo llevan (o justamente por eso) más allá del principio del placer. En esas fijaciones pulsionales que hacen a su repetición, detectadas en medio del devenir de la palabra que se reitera en cada sesión, y en la que los significantes van corriendo sin que se sepa a priori qué trazado va a dibujarse, leemos de a poco algo que se escribe con insistencia una y otra vez, el precipitado de ciertas marcas que se repiten, cierta escritura que se va esbozando y puliendo al ritmo de la escucha, las intervenciones y los efectos de interpretación analítica que cada tanto sobrevienen y la trastocan.
por Rómulo Lander
El “acting out” muchas veces es muy útil en el trabajo analítico. La conducta expresada en estos actos, muchas veces incomprensible, es una forma de obtener información de lo que el paciente no es conciente y asunto de lo cual no puede presentar en palabras. Estos actos tienen tanto valor como el trabajo de los sueños, que como sabemos nos permite conocer algo de lo inconsciente en cada paciente. El acto muestra aspectos de la vida mental que el paciente no puede poner en palabras.
por Sebastián León
El presente texto procura interrogar el lugar del juego en la teoría psicoanalítica de Sigmund Freud, a partir de algunos aportes de la filosofía de Martin Heidegger. El artículo sugiere repensar la conceptualización del juego como función psíquica en referencia a la condición de estar-en-juego propia de la existencia humana. Luego de revisar el estatuto del principio de placer y las concepciones del juego en la teoría de Freud, son introducidas las nociones de «principio de razón» y «ética del juego», como modo de reformular algunas de las consideraciones freudianas sobre el psiquismo humano.
por Pablo Fernando López
La idea es compartir un recorte de una experiencia clínica con un sujeto psicótico, con la particularidad, no deseada, de asistir a conceptos fundamentales en la fenomenología de esta estructura. Me refiero al tiempo de descompensación, con la irrupción de los momentos de perplejidad, alusión, suplencia, metáfora delirante y compensación.
La particularidad del caso permite distinguir tres momentos claros, dentro de una psicosis, atravesados por circunstancias por fuera de la dirección de la cura y la compensación maniobrada dentro de la misma
por Beatriz Sak
Cuántas veces ante diferentes situaciones reaccionamos ante los otros y nosotros mismos diciendo un categórico "yo soy así." Lo escuchamos en el consultorio. Surge la pregunta en un análisis. ¿Qué significa? ¿Quién dijo que soy así? Y si soy, ¿quiere decir que no puedo cambiar? El ser humano se muestra con su Yo. ¿Qué se dice del yo? Yo humano: Serie de defensas, negaciones, barreras, inhibiciones, fantasías que orientan y dirigen al sujeto. Organización completa de certidumbres, creencias acerca de sí mismo. Freud lo denomina sistema ideación.
por Jorge M. Helman
Basado en una expresión de Michel Foucault, la clínica es la política de los hechos, este trabajo intenta hacer un recorrido por las problemáticas patologías emergentes en el incipiente siglo XXI. Se pasará revista a las miradas tradicionales, así como a las bibliografías que las han constituido. Ello dará lugar a la comparación con los tiempos actuales. Estas problemáticas tienen como base una fuerte presencia del cuerpo como escenario de una dramática no tramitada simbólicamente, así como el ostensible debilitamiento de la palabra que es solidaria con el primer aspecto señalado. Dos preguntas potentes surgen de la reflexión precedente: ¿se trata de nuevas formas mórbidas, hijas del momento actual? O, por el contrario, ¿ha variado la mirada de los profesionales que hacia ellas se dirigen? Este último interrogante apunta a las precisiones establecidas por Georges Canguilhem en su clásico estudio Lo Normal y lo Patológico. Lo que sigue es un intento de certera explicación: se ha producido un importante ensanchamiento del orden Real en detrimento de los registros imaginario y simbólico. Éstos constituyen intentos interpretativos acerca de este fenómeno contemporáneo. El trabajo intentará, simultáneamente, discernir entre formas mórbidas y nuevas modalidades subjetivas que pueden estar naciendo al amparo de los tiempos actuales. Por último, cabalgando en la polisemia del título: Tiempos Modernos, se analizará el film de Chaplin como texto anticipatorio. Construido en 1936, presenta rostros premonitorios sobre los momentos actuales.
por Eduardo Pellegrini
Roberto es un joven de 15 años con Síndrome de Down. Cuando lo conocí, cursaba quinto grado en una escuela privada de educación común, bajo la modalidad de “alumno en integración”. La escuela, decidió no renovarle la vacante para el año entrante por no haber alcanzado los objetivos pedagógicos esperados para un alumno de quinto grado. Como destino, la institución sugirió un taller laboral o una modalidad de escuela post- primaria.